La fiesta se paga
La farra impuesta en Barcelona y las excasas horas de sueño ralizadas en tal magno viaje, me llevaron a estar toda la semana un pokillo tocado. Entre infinidad de horas de trabajo, vaya semana la nuestra (hasta la p...) siempre se tenía tiempo pa la siesta de 3 a 4.Por cierto, markitos!!! Me viniste a ayudar, no has venido para andar a sacarme fotos, Cabronasso, jejeje
(Pero como ves... las pongo, jijiji)


0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home